dimecres, 3 de febrer del 2010

1886: Montjuïc Connection




Si algú pensa que el nostre era un barri tranquil en èpoques pretèrites, d'això, res de res. Sovint s'esdevenien molts robatoris, més aviat de poca volada, que tenien per protagonistes gent que vivia al barri. Montjuïc, a més, era un indret força insegur. Pel setembre de 1886, concretament el dia 18 de setembre, La Vanguardia comentava unes accions delictives relacionades amb el contraban, que s'esdevenien a Montjuïc. Cal dir que hi havia aleshores molts indrets on els Burots cobraven els impostos dels consums, cosa que propiciava aquest tipus d'activitats.

Parece que de algunos días a esta parte y durante la noche, la montaña de Montjuïch se convierte en teatro donde libran las batallas en su perpetua guerra los matuteros y los empleados del resguardo de Consumos.

No hace muchos días hubo una de palos, tiros y otros excesos, a causa de pretender los matuteros que a viva fuerza les fuera franqueado el paso por el Resguardo, a fin de introducir cierta cantidad de aceite en el Poble Sech. Resultado del suceso fue el encontrar los empleados, abandonados en el lugar de la acción, unos noventa kilogramos de aceite, un chuzo y una pistola, u que la guardia municipal detuviera en las avenidas del referido barrio del Poble Sech, y procedente del lugar de la lucha, un sujeto que resultó ser un explorador o avanzada de los matuteros, a cuyo servicio parece que entró cuando la comisión de Consumos lo expulsó del Resguardo por su reprobable conducta.

No han escarmentado, sin embargo, los matuteros, ni tampoco lo han creído así los empleados de Consumos, y en prueba de ello, lean nuestros lectores lo que ocurrió a las diez de la noche del día 16 del corriente mes. Teniendo noticia la comisión de Consumos que una cuadrilla de matuteros proyectaba una gran entrada fraudulenta por dicha montaña de Montjuich, dispuso que varias parejas de la segunda ronda del contra-registro, a las órdenes del cabo de dicha ronda se apostaran en puntos convenientes por donde era de preveer pasaran los matuteros. En efecto, a dicha hora pudieron observar que primero un desconocido y después otro llegaron por las inmediaciones de donde estaban situados, registrando todos los puntos, y como les pasaran desapercibidos los empleados, encendieron luces que sin duda eran señales convenidas con otros matuteros, para demostrarles que tenían expedito el camino; así es que momentos después fueron llegando varios individuos hasta contar el número de siete, con un pellejo cada uno, conteniendo seis de éstos media carga de vino y el otro igual cnatidad de espíritu de vino que les fue decomisado. Fueron detenidos aisladamente uno después de otro, sólo por dos individuos.

Cal pensar en l'escassedat de l'època, considerant el gruix del botí i el risc que es corria.

4 comentaris:

Xiruquero-kumbaià ha dit...

Vell i estès ofici aquest del contraband. Ara, en comptes de consums hi ha l'Iva, per això es fa tant sovint la "innocent" pregunta de "vols factura"?
Amb una expressió em quedo que m'ha agradat molt llegir al final del text que reprodueixes: "espíritu de vino".
No sé si en castellà també era així o és una traducció literal del nostre esperit de vi, que jo faig servir de tota la vida, davant la cada vegada més freqüent cara d'interrogació de l'interlocutor.

Tot Barcelona ha dit...

Curioso, muy curioso...A veces se me ocurre ojear los diarios de la época (la Vanguardia sobre todo) y hay noticias que hacen pensar...salut

Júlia ha dit...

Bon dia Xiruquero, tens raó, és tan bonic això d'esperit de vi...

Júlia ha dit...

És una suerte, MIquel, poder consultar tan cómodamente la hemeroteca de La Vanguardia, yo me paso muchos ratitos paseando por allí... Además, como tenemos tanta mala memoria y vivimos de tópicos es una buena manera de recuperar realidades pasadas 'en su contexto'.